xxx.
Lo único que necesitáis saber para entender esta historia, es que Aura
nació muerta (más que el resto, quiero decir) y que Narrador 1 y
Narrador 2 no somos la misma persona. Que Narrador 2 no ha aparecido
todavía, y tan cobarde es que posiblemente ni llegue a hacerlo. Que a
mediados de los años treinta, del siglo XXI, se dio lo que más tarde se
conocería como la tercera revolución industrial, que en realidad vino
con el nombre de fábrica (jaja) ya editado; poco tiene que ver con las
tristes revoluciones del carbón y el vapor o de la electricidad.
Esa
era la palabra que lo ocupaba todo. Periódicos, televisión, radio,
megafonía publicitaria en las ciudades, relojes, revistas, hasta el
maldito papel de baño. Comimos, bebimos y respiramos la palabra cyborg,
casi sin llegar a rozar el concepto. Aunque los escépticos como yo no lo
creímos.
No lo creímos hasta que lo vimos.
Y cuando lo vimos, nos rebelamos.